_Título: REACTIVACIÓN DEL ENTORNO URBANO DE MILÁN: DEPÓSITOS FERROVIARIOS EN DESUSO
_Autor: Raquel Prendes
_Tutor: Javier Maroto Ramos
_Fecha: Marzo 2013
_Escuela: ETSAM
_Sección: urbanismo, infraestructuras, espacio público, centro social
_Descarga de archivos dwg: Detalles
_Sección: urbanismo, infraestructuras, espacio público, centro social
_Descarga de archivos dwg: Detalles
<< Escala metropolitana
La ciudad de Milán ha conocido, durante los últimos diez años, un
aumento del suelo urbanizado muy considerable. Un crecimiento que se produjo
sobre una ciudad con un 70% de suelo ya urbanizado y que, entre 1999 y 2009, ha
visto su superficie urbanizada aumentar en 20.063 m2.
Este aspecto ha llevado al último Plan Territorial General (PGT,
por sus siglas en italiano) a plantear un nuevo modelo para la expansión de la
capital industrial del norte de Italia. En la práctica, el Ayuntamiento de
Milán fija algunos objetivos a conseguir: la difusión de servicios para el
ciduadano en la escala de los barrios o el refuerzo del sistema verde son
algunos de ellos. Pero el más pegado a la realidad estructural de una ciudad
ultraurbanizada, es el de “proyectar un equilibro de uso entre el centro y la
periferia, incentivando la presencia del sector terciario y creativo en toda la
ciudad”. Y, a la vez, “completar la recalificación del territorio en desuso”.
Al haber nacido y crecido como polo industrial del norte de
Italia, Milán ha ido acumulando una amplia variedad de espacios urbanos dejados
al abandono en los últimos años y debido sobre todo a la deslocalización de la
producción de grandes nacionales. Más allá de las consecuencias económicas y
sociales para la región, el entorno urbano ha resultado particularmente
afectado por esta situación: en 2009, se registraban en la ciudad 53.000 metros
cuadrados de espacios industriales en desuso.
Rescatar del abandono estos espacios ya existentes y urbanizados
se convierte pues en una oportunidad para la creación de espacios de vida
comunitaria, de encuentro y de conexión entre las afueras y el centro.
La búsqueda de una solución de continuidad en la que pudieran
confluir todas estas características se centró, en este proyecto, en tres
depósitos ferroviarios en desuso. Dichos depósitos son,en sí,uno de los objetivos
principales del PGT: representan la mayor superficie disponible para la restructuración
urbana y tienen una posición estratégica con respecto al crecimiento de la urbe.
A pesar de que todos los depósitos ferroviarios tienen las mismas carcaterísticas
en cuanto a estado de abandono, es su entorno el que marca las diferencias
entre ellos: unos ubicados en un entorno urbano favorable, y otros en los que
las condiciones externas los convierten no sólo en lugares ajenos al barrios en
que se ubican, sino también desconectados del sistema urbano y de servicios de
la ciudad. Estos últimos han sido tomados en consideración de forma
pormenorizada como estudio previo a la realización del proyecto: el depósito
Farini, en el noroeste de la ciudad, el depósito de Rogoredo, situado en el
sur, a escasos kilómetros del aerepuerto de Linate, y de Greco, en el noreste
de Milán.
<< Escala urbana
Si bien los tres depósitos ferrviarios presentan características
parecidas, el de Greco resulta paradigmático para un modelo de ciudad claramente
partida en su vieja alma de ciudad industrial y su propulsión para ser un
centro de referencia en la Europa económica y cultural. El prestigioso Teatro
degli Arcimboldi y su escuela musical y el enorme complejo Univiersitario de
Bicocca, constituyen esa cara más moderna. La otra cara es la de la “vieja
Milán”, revitalizada solo gracias a los flujos de inmigrantes que se instalaron
en las numerosas viviendas protegidas de la zona. En medio, física y simbólicamente,
se instala la estación de trenes, nudo neurálgico de una ciudad en constante
movimiento. El depósito abandonado no hace más que subrayar la distancia entre
las dos caras de una misma ciudad, impidiendo cualquier interacción entre
ellas. Una diferencia que salta a la vista en el mismo skyline de la ciudad:
entre las viejas casas bajas y los altos edificios cúbicos de la universidad,
las vías del tren representan un vacío que aumenta el contraste entre estos dos
mundos.
Tras los resultados del estudio, se plantea un espacio para
programas públicos culturales que ofrezca un nuevo caracter y una nueva vida al
barrio, difuminando la imagen industrial típica de los depóstios ferroviaros
para crear un punto de intercambio constante y fluido: lugar tanto de tránsito
como de estancia, sin pertenecer ni a una ni a la otra cara de la zona elegida
y que, dedicándose a actividades culturales de interés para los ciudadanos
residentes y para los de paso, pueda ser un espacio donde dar vida al
intercambio y a la vitalidad del barrio que busca el PGT.
<< Escala proyecto
Estrategia número 1
Los principales elementos del proyecto son los módulos
estructurales que generan los espacios. Estas estructuras se dividen en tres
tipos: módulos de actividad, módulos de acceso y módulos patio-conexión; y están
configuradas geométricamente para que encajen entre sí al ser agrupadas. La
importancia de estas piezas reside en el hecho de que responden al diálogo
entre las dos escalas del entorno urbano. Por una parte, el volumen general de
las piezas unidas entre si responde a la configuración de la zona de la
Universidad Bicocca, caracterizada por la gran ocupación de las manzanas. Por
otra, la agrupación de módulos distintos entre sí se relaciona con la pequeña
escala de suburbio tradicional milanés del área de Viale Monza.
Estrategia número 2
Dada la ubicación del solar, es fundamental la interacción con los
elementos existentes, en este caso un gran edificio administrativo-industrial.
Para dar un carácter de continuidad al proyecto con el entorno, se reutiliza
parte de su estructura y se establece una conexión directa con la sucesión de
los módulos.
Estrategia número 3
A nivel urbano lo más característico del proyecto es su posición
estratégica entre los principales flujos de dos áreas totalmente diferentes.
Por eso, y para que el proyecto no sea un tercer elemento añadido, se busca la
conexión entre ambas partes, de modo que la actuación sirva de transición y de
punto de encuentro en un lugar transitado por numerosos ciudadanos a diario,
pero sin ninguna relevancia urbana en la actualidad.
Estrategia número 4
Para darle una nueva calidad y cualidad al depósito ferroviario,
se proyecta un nuevo parque-jardín que responda a las necesidades de los
ciudadanos. Es importante mencionar el hecho de que en Milán en general, y en
el barrio de Greco-Monza en particular, escasean los espacios verdes públicos.
Estrategia número 5
Como último elemento, se disponen una serie de pórticos-galería
cuya función es disolver los límites del entorno, dotando al área de actuación
de distintos puntos de acceso y al mismo tiempo dejando la opción a una posible
ampliación o definición más concreta de los confines.
MEMORIA ESTRUCTURAL
El proyecto se plantea como un catálogo de módulos independientes
estructuralmente entre sí, de modo que el conjunto total del edificio será la
resultante de la combinación de éstos. Así pues, se genera una estructura que
se pueda reproducir sucesivamente para resolver situaciones de regeneración
urbana a través de un sistema espacial y constructivo sencillo, basado en la versatilidad
de los espacios. La estructura de cada módulo se basa en forjados octogonales
que modifican su tamaño en cada planta y generan un volumen distinto en cada
caso. El movimiento de los forjados se produce por traslaciones, alargamientos
o contracciones de 50cm en las vigas, obteniendo las tres geometrías
principales.
El forjado se resuelve mediante unas vigas de contorno y unas
vigas Fink, a modo de cercha, obteniendo un hueco libre en el centro. Según
cada caso, este espacio irá ocupado por las cajas que sirven a los espacios o
por los vacíos que conectan las plantas en sección.
MEMORIA CONSTRUCTIVA
La construcción del módulo se basa en su flexibilidad material: el
programa no es lo fundamental así que se debe garantizar que un esqueleto tan
rotundo pueda utilizarse en diferentes situaciones, atendiendo a distintas
necesidades y condiciones programáticas y constructivas. El módulo se divide en
tres partes fundamentales: estructura, cajas de servicios y piel. La estructura
se construye por partes: los marcos principales de cada frente se montan en
taller y están soldados, mientras que las vigas de los forjados se atornillan
en obra, lo cual facilita tanto el montaje como el reciclaje en un futuro.
El interior de los módulos, dependiendo del tipo, está vacío a
modo de patio o contiene los espacios servidores. Éstos últimos se resuelven
con cajas de paneles de madera contralaminada CLT. Éstos paneles autoportantes
prefabricados vienen de fábrica con el corte exacto, y se montan a través de un
sencillo sistema de ensamblaje que no requiere largos tiempos en obra.
Por último se opta por una piel ligera, malla de acero cortén
deployè, que caracteriza el espacio interior con distintas transparencias según
el uso, pero dentro de un rango lo suficientemente amplio para garantizar un
cambio de uso del módulo en un futuro.
Precioso proyecto Raquel. Te vamos a echar mucho de menos en las tutorías! :)
ResponderEliminarMucha suerte en tu vida!
Jose